Se dio el visto bueno a dos expedientes de modificación de crédito para que el consistorio disponga de una cuantía económica con la que acometer inversiones en el futuro.
Tal y como establece la modificación de la Ley reguladora de las Bases de Régimen Local que permitía la posibilidad de convocar y celebrar sesiones de sus órganos colegiados, este viernes 3 de abril, tuvo lugar la sesión plenaria pendiente del mes pasado que se debió suspender, a causa de la declaración del estado de alarma por parte del Gobierno de España.
Los 17 concejales que conforman la Corporación Municipal, así como la secretaria del ayuntamiento y la tesorera interventora, asistieron a este pleno municipal, que se desarrolló telemáticamente, respetando las normas del confinamiento y con la finalidad de continuar aprobando asuntos municipales.
El alcalde de La Roda, Juan Ramón Amores, pidió, en primer lugar, que se guardara por parte de todos los presentes un minuto de silencio en homenaje a las personas fallecidas a causa del Covid-19 desde los respectivos domicilios de cada concejal y quiso tener unas palabras de agradecimiento para todos aquellos que deben trabajar en estos días de confinamiento, así como a todos los rodenses que están respetando las normas de confinamiento.
De acuerdo a los puntos que figuraban en el orden del día, se dio el visto bueno a dos expedientes de modificación de créditos para que el consistorio pueda contar con una previsión de gasto que permita desarrollar en el futuro inversiones necesarias en el municipio.
Tal y como se constató, un 60% del superávit de 2019, es decir, 1,3 millones de euros se destinará a amortizar deuda pendiente, mientras que alrededor de 660.000 se podrá reservar para futuras inversiones públicas. Según lamentó el concejal de Hacienda, Alberto Iglesias, “nos gustaría poder emplear ese dinero también pero lo debemos destinar a pagar deuda”. Añadió que, “desde nuestra opinión el pueblo debe funcionar una vez que acabe esta situación porque tenemos muchas necesidades”.
La oposición, por su parte, consideró que se podría reservar un fondo de contingencia con dicha cantidad para las consecuencias de la pandemia, a lo cuál respondió Iglesias que “en caso de necesidad se podrá disponer de fondos para ello”. La modificación de créditos contó con el respaldo favorable de los 10 concejales socialistas y las 7 abstenciones del grupo popular.
Concluyó Amores, agradeciendo la interlocución que mantiene con la portavoz del grupo municipal del Partido Popular, Delfina Molina, indicando que “ninguna medida se anuncia sin antes tener la unanimidad de las 17 personas que trabajamos como Corporación en el ayuntamiento”. Y también aprovechó para explicar que “ante quien demanda más datos, nosotros publicamos la información de la que disponemos y, a través de la fluida relación que mantenemos con Delfina, los hacemos extensivos al resto de concejales”. Invitó a seguir trabajando a todos en la misma dirección y, finalmente, animó a la ciudadanía “a seguir manteniendo la corresponsabilidad y solidaridad y, lo único que podemos seguir haciendo, según pasan los días, es quedarnos en casa”.